Los peques de la casa tienen un estilo de vida muy activo, lleno de juegos y deportes que les hacen correr, saltar e investigar su entorno. Estas actividades favorecen su desarrollo físico y mental, pero también conllevan ciertos riesgos, como caídas y golpes. De acuerdo con un artículo del Consejo General de Dentistas, se estima que alrededor de 4,5 millones de españoles han sufrido algún tipo de traumatismo dental, lo que significa que la prevalencia global es del 10%.
Según un estudio publicado en la revista Odontología Pediátrica, las caídas y las actividades deportivas son las causas más comunes de traumatismo dental en niños. Este tipo de lesiones también son frecuentes en adolescentes durante la práctica deportiva, con una prevalencia del 45%.
Estos incidentes comunes que pueden ocurrir en cualquier momento, y que en la mayoría de las ocasiones son leves, en algunos casos pueden provocar daños en la boca y en los dientes anteriores, también llamados incisivos. Los incisivos son especialmente vulnerables a los traumatismos porque están ubicados en la parte frontal de la boca y, por tanto, son los primeros en recibir el impacto en una caída o golpe.
Posibles consecuencias del traumatismo dental
El traumatismo dental puede tener varias consecuencias. Sin embargo, aunque esto no se produzca, el simple hecho del golpe requiere la atención y examen de la zona afectada para asegurarse que no se ha producido ningún daño interno. Hay que tener en cuenta que pequeños traumatismos pueden afectar al nervio y a las estructuras que rodean a los dientes, tanto en los dientes definitivos como en los primarios, también conocidos como “dientes de leche”. Estas son algunas de las consecuencias más visibles o notorias:
- Dolor: Se trata de una consecuencia bastante común, especialmente si se produce una fractura, se pierde parte del diente o hay afectación de estructura de soporte (conjunto de tejidos que rodea y soporta los dientes).
- Sensibilidad dental: Si hay exposición de capas profundas del diente cercanas al nervio.
- Cambios en la apariencia dental: Cambios como decoloración, fracturas, astillas o desplazamiento de la posición del diente.
- Problemas en la mordida: Si se origina en los dientes posteriores, puede afectar la mordida y la capacidad de masticar adecuadamente los alimentos (relacionado con cambios de posición).
- Infección dental: Cuando se produce una fractura o una fisura en el diente, puede provocar una infección dental que puede extenderse a la pulpa y provocar una necrosis pulpar. Más probable cuando hay traumatismo sin examen primario y monitorización de la zona.
- Pérdida dental: Si el golpe o la caída es grave, puede provocar la pérdida de la pieza afectada.
¿Qué hacer ante un traumatismo dental infantil?
Desde nuestra clínica dental en Valencia recomendamos a nuestros pacientes que presten especial atención a los peques después de un golpe o caída. Cuando un diente ha sufrido un traumatismo se le considera una urgencia y se debe acudir al dentista de inmediato para recibir el tratamiento oportuno.
En el caso que el diente se haya desplazado o fracturado, es importante manejarlo con cuidado para evitar dañarlo aún más. La pieza dental se debe sujetar por la corona, que es la parte que se puede ver por encima de la encía, y evitar tocar la raíz.
Cuando hay sangrado, se puede aplicar frío con una gasa en la zona afectada para controlarlo. La gasa también es útil si el diente se ha fracturado para cubrir la zona y de ese modo protegerla.
Por otra parte, le recomendamos que, siempre que sea posible, acuda al dentista infantil (odontopediatra) con el diente o fragmento desprendido, dentro de un recipiente con suero o saliva, por si pudiera volver a colocarse. Es importante no limpiar el diente ni frotarlo para evitar dañarlo.
Además, también se pueden tomar medidas preventivas, sobre todo si realiza alguna actividad deportiva, fomentando el uso de protectores bucales. De esta manera, se puede reducir los riesgos de sufrir algún traumatismo dental y asegurar una buena salud bucodental tanto para los más pequeños como para los más mayores.
En resumen, acudir al dentista infantil después de un golpe en los dientes o en la boca es fundamental para realizar una evaluación a fondo y tratar adecuadamente cualquier daño, y de ese modo prevenir complicaciones y garantizar un pronóstico favorable a largo plazo. Desde Clínica Dental Primitivo Roig, nuestra clínica dental en Valencia, te recordamos que sonrisas sanas… ¡sonrisas felices!